Regla uno: Mantenga siempre el cañón apuntando en una dirección segura Al asegurarse siempre de que el arma esté apuntando en una dirección segura, se asegura de que no se haga ningún daño si el arma fuera disparada accidentalmente. Un dirección segura significa que si el arma apuntaba en cierta dirección y se apagaba no causaría lesiones ni daños. Basado en su sentido común puede dictar lo que se considera una dirección segura. Regla dos: Mantenga siempre el dedo fuera del gatillo hasta que esté listo para disparar. Cuando sostengas...